Me habría condenado (en tiempo pasado)

Tú,
fiel conocedor de mis palabras.
Tú,
que has llenado el vacío
donde tus labios son mi alivio.
A ti,
que te pido.
A ti,
que te imploro:
quédate hoy y no te vayas mañana.
A ti te habría dicho:
me condeno.

Me habría asustado,
habría temblado,
con estos pensamientos tan pesados.
Pero,
no te importa,
no me importa,
¿A quién le importa?
Los demonios también fueron ángeles algún día.
Y,
aún así,
me habría condenado
-en tiempo pasado-

Me llevabas a un colapso,
me llevabas a un torbellino,
me llevabas a la calma.
Mis pensamientos se iban,
mis sentimientos regresaban,
tú no ibas a por ellos,
tú los dejaste ir,
y ellos no volvieron.
Y,
aún así,
me habría condenado
-en tiempo pasado-

Mientras yo vivía en la inopia,
afuera el mundo era un infierno.
Y,
aún así,
me habría condenado
-en tiempo pasado-

Odié tanto quererte,
odié no poder odiarte.
Y sólo poder odiar lo que no podía odiar
me hacía quererte más.
Base intacta de que,
mi odio es tan puro como mi querer.

No creí poder encontrar manos
que encajaran imperfectamente en mi mano,
y que con sólo encajar fuese perfecto para mi mano.
Mi mano,
que no deja de tocar tus manos.
Mi mano,
que no deja de entretenerse con el vello de tus brazos.

¡Ups!
Creo que me he ido de mis límites,
creo que me he ido del presente,
me he ido del pasado,
¡Demonios!
Pero,
¿Qué más da?
Ya te lo había dicho,
me habría condenado
-en tiempo pasado-.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Esta vez. Esta casa

¿Qué es el amor?

Sueño

Mis pensamientos y yo