Mi ángel interno

No necesitamos una causa existencial, es algo que ocurre y ya; nuestra naturaleza está escrita por nosotras mismas, somos las que decidimos cómo llorar y por quién (o qué hacerlo). Somo humanas, estamos aquí, en un mundo antiparalelo, un mundo que corre en dirección opuesta a nosotras. Mira la duda en tus ojos, mira la mía en los míos, nuestros espejos son uno y reflejan almas distintas. ¿Te has tomado el tiempo para mirar a través de ti? ¿Has visto cuánto has hecho? y ¿Aún no eres feliz? ¿Para qué vivimos si no sabemos lo que podemos hacer por otros o por nosotros mismos? Para cambiar, se necesita de ti, es algo interno, algo, que yo puedo entender. Pero ¡Mira como te veo yo! Alma pura y transparente. Alma, que habita en un mundo parecido al mío. No te detengas a pensar "¿Qué será de mí?" No te limites a solo existir. "¿Y qué pasa si no es suficiente?" "¿Qué pasa si el mundo no puede llenar este vacío que siento?" No te engañes. Estás confundida. ...

¿Por qué buscar un porqué? Yo naturalmente lo hago pero, ¿Qué pasa cuando no lo hay? A veces las cosas son como son, sin tener que pensar tanto, a veces, las personas somos complicadas ¿No ves que aquí, justo aquí, mis nervios me traicionan? Soy lo que ves, con defectos y estando bien lejos de ser perfecta. ¿Quieres saber qué hay en mi cabeza? Es un poco complicado, pero el papel es paciente, y estoy segura de que, al igual que tú, esperará, y esperará aún más para lograr entenderme. ¿Sabes? Todo lo que sentimos se encuentra en el trasfondo de todo lo que decimos, y lo que decimos afecta lo que sentimos, y a pesar de que ambas experiencias se encuentran relacionadas, pertenecen a territorios distintos. Cada uno de nuestros sentimientos y emociones demandan demostrarse, liberarse, pero he ahí el dulce albedrío de mi vida, personas como yo se complican, mi mente se encuentra en un torbellino de contradicciones, pues hablar de cosas profundas y personales nunca fue mi fuerte, lo típic...

Extrañamente cuando te sientes perdida, pierdes la noción del tiempo, los minutos pasan, y tú te sientes cada vez más ida, en otro mundo, uno en donde las palabras no tienen sentido alguno... ¿Por qué siento entonces que estoy muriendo? Lentamente, día a día, me extingo, tal como la llama azul puede permanecer encendida eternamente. A lo lejos, observo. Las nubes se pintan de gris, mientras que el azul del cielo oscurece, la eternidad se hace eterna, y mis latidos disminuyen. Por mis ojos se desbordan lágrimas mientras siento que este vacío (el de sentir que muero) me acuna de los pies a la cabeza. ¿Por qué siento este vacío? ¿Será que estoy muerta ya? Necesito escapar de esta realidad. Mi realidad. No me dejen pensar porque acabaré con mi alma... ¿Cómo puedo ser yo? No hay peor infierno que aquel que vives en carne propia. Sentir que la piel se quema sin ningún fuego que la encienda, solo aquella llama que se prende en tu interior y te desgarra el alma, lentamente, muy lentamente,...